
Micro-memorias
Ejercicios de memoria y creación colectiva con ayuda de las TIC con el grupo del adulto mayor de San Andrés de Pisimbalá

Isabel Bastidas
Blanca Velasco
“La Historia de San Andrés
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Cuando yo conocí San Andrés era un pueblito muy pequeño que apenas había la iglesia y unas pocas casas, los caminos eran de herradura, y habían más indígenas que campesinos. Se vivía un ambiente muy feliz. También estaba la escuela y la casa cural.
Las fiestas que se celebraban eran muy bonitas porque tocaban tambores, flautas y se jugaba la vaca loca y se quemaba mucha pólvora en especial el castillo que los indígenas mismos lo elaboraban.”
“San Andrés
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Era muy bonito porque teníamos la iglesia que hecha por los antepasados era una joya. Tenía a la entrada la muralla de piedra que era una protección que los indígenas tenían.
San Andrés era todo adornado en piedra, al frente de la iglesia había un portón grande de madera y atrás había otro en madera también. La iglesia era lo mismo que ahora h sido quemada 2 veces, la escuela también era de paja y en la piedra grande que hay allí a un lado enterraban a los indígenas que eran de más alto rango y uno que me acuerdo se llamaba Abram Cuello.
La historia de la fiesta de San Andrés se componía de fiestero y albacero, con ayudantes llevaban la chicha y la pólvora. El fiestero lleva la bandera para entrar a la iglesia. Para el padre le llevaba una gallina, plátanos, yucas y arracachas. Las viviendas de los indígenas eran de hoja de caña y las paredes de caña de maíz, y dormían en suelo de tendido de cueros de ganado y de cobijas de lana de ovejo.”
“Historia de San Andrés de P.
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De lo que yo me recuerdo que es la fiesta del apóstol de San Andrés era muy diferente a ahora, en ese tiempo llegaban mucho indígena con tambores y flauta y mucha pólvora y mucho vinete con calabazas de chicha de caña de azúcar. Pelaban alguna cosa y hacían mote con carne, los vestidos de las mujeres indígenas eran anacos, faldas de la lana y los hombres era pantalones de lienzo hasta la rodilla y sombrero de palma tejidos por ellos mismos. La capilla era hecha por los indígenas en ese tiempo alguna casa era el techo hecho de hojas de caña. En ese tiempo los que tocaban tambor y flauta eran mas apellido Guetocué, Yatomaz, Foelle, y otro apellido Cunacué.”

Mercedes Zavala
Deyanira Ramírez
Crucita Sansa
“Plantas medicinales
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Artrítis
Se licua 1 libra de manzanas en 1 litro de agua, se deja en reposo 15 días, al cabo de los cuales se toma 1 copita del líquido preparado en ½ vaso de agua; endulzándolo con miel de abeja. Repetir cada 6 meses.
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Estreñimiento
Se hace infusión de 20 gramos de hojas y flores de durazno en ½ litro de agua, 3 tazas diarias.”
“Historia de las candilejas
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Una joven no dormía en la noche se la pasaba en la ventana, cuando venían las candilejas y le dijeron que mañana le daban una vela, y al otro día le dieron la vela cuando amaneció fue a ver la vela y era una canilla de difunto y la muchacha dejó de ventaniar. Las candilejas son las almas de las familias, que se las pasan peleando entre ellos al quedarsen dormidos el demonio toma las almas de esas familias transformándolas en bolas de candela, atemorizando a las personas que las ven más que todo en semana santa, los días jueves y viernes santo.”
“El canto del duende
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El duende es una persona muy pequeñita que lo sigue a uno cuando se enamora de alguna persona más que todo los niños para esconderlos en grandes raíces de los árboles, le lleva a uno comida cruda como yuca, carne y pan de todo lo que él roba.”

Ilia Narváez
Ana Figueroa
“Leyenda del Duende
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El duende se presenta en personas conocidas por las personas dicen que son espíritus que desobedecieron a Dios y quisieron ser más grandes que Dios y Él los castigó mandándolos a vagar por el mundo haciendo daño a las personas que no les cae bien. Muchas veces ayuda y acompaña en el camino pero otras veces esconde las cosas y no deja ver los caminos y se pierden.”
“El duende
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Es un espíritu que es muy travieso y habita en las selvas, humedales y bosques encantados. Contaba mi abuela que a ella la persiguió mucho tiempo después que ella quedó viuda, pues no la dejaba en paz en ningún momento. Preocupada por esta situación buscó la contra para esta situación que consistía en llevar un tiple y una camándula a media noche que él llegaba y que la acompañara una persona que no fuera nerviosa. Preciso llevó este espíritu a media noche y la persona que estaba con mi abuela prendió una vela y el duende estaba tocando el violín, y apenas vio la luz le dijeron acuérdate la gloria que perdiste en el mundo y se fue.
La historia de las plantas medicinales para las enfermedades, plantas caseras la yerbabuena para la diarrea, la mejorana para el dolor de estómago, el cedrón para los nervios, la valeriana para la presión, la sábila para la gastritis, el toronjil para la desesperación, la coca con limón para la infección, el hinojo para la inflamación de estómago, el ajenjo para la cabeza.”
“Leyenda La vieja Candela
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Dio origen al nombre que hoy lleva la población de Calderas
Antiguamente en este lugar habitaban indígenas paéces. Era difícil conseguir el fuego para alumbrar durante la noche y cocinar los alimentos. Vivía entre ellos una anciana físicamente fea, con aspecto de bruja pero, buena, generosa y servicial conocida de todos los habitantes. La llamaban “la vieja Candela”. Tenía un secreto que a nadie le revelaba: A todos los abastecía de fuego porque iban a pedirle candela alzaba los brazos y del sobaco le salía candela y quien le pedía encendía una antorcha y llevaba a su rancho.
Cuando llegaron los blancos españoles a recorrer la región subieron hasta ese lugar, se enteraron de lo que sucedía y al conocer a esta anciana le pidieron que les revelara su secreto, a lo cual ella se negó. Entonces ella se escondía, la persiguieron y al sentirse muy acosada subió al cerro de la Aguadita que es muy alto, desde allí levantó los brazos y volando cayó a un charco del rio Coquiyó y ardiendo en llamas se ahogó en él. Ese atardecer se tiñó de colores que reflejaron en el cielo y en las aguas del rio.
Así terminó la vida de la vieja Candela, los habitantes la extrañaron mucho, su presencia les hizo mucha falta y en su recuerdo dieron al lugar el nombre de calderas, situado al norte de San Andrés y está habitada hoy día por muchas personas y gobernada por un Cabildo.”
Durante el desarrollo de la pasantía se realizaron talleres de manejo del procesador de textos a partir de relatos cortos referentes a la memoria, los saberes y la cultura tradicional de San Andrés de Pisimbalá. Este ejercicio fue protagonizado por las mujeres que hacen parte del grupo del adulto mayor, y tuvo como centro de operaciones la Biblioteca Pública.
